Educación preescolar: una marca que permanece
Los primeros años son clave para desarrollar habilidades relevantes para el resto de la vida.
La educación que recibimos se traduce en oportunidades. A través de la educación, desarrolla mos herramientas que en el futuro nos distinguirán del resto y nos permitirán integrarnos de manera propositiva a la sociedad. Para desarrollar estas habilidades debemos ir paso a paso, y el primero que damos es, sin duda, significativo. Según Unicef, la base del aprendizaje, es decir, los fundamentos que marcarán el resto de conocimientos y habilidades que desarrollaremos, se constituye en gran medida antes de la escolaridad. Estas bases se traducen en la capacidad de los estudiantes para realizar sus estudios a lo largo de la vida. Un retraso en este momento de la vida puede conllevar a futuro bajo rendimiento y abandono escolar.
El preescolar es una oportunidad y un desafío al mismo tiempo. Se trata de la primera experiencia de escolaridad, en un momento en el que el aprendizaje y el juego no deben disociarse. Un adecuado centro infantil debe generar un ambiente de aprendizaje que facilite la interacción de los niños con el mundo y con el resto de personas.
Para Wendy Frixone, directora de Comunicación y Admisiones de Liceo Campoverde, un buen centro de educación preescolar se caracteriza por respetar el ritmo y desarrollo de cada niño, considerando su edad. Además, debe ser un espacio seguro. Esto es importante puesto que “el asistir a un preescolar con esas características asegura que la primera experiencia del niño en el ámbito escolar sea positiva”.
Otro aspecto que hay que tomar en cuenta son los valores de la institución, según Beatriz Larrea, rectora de Colegio Cervantes: “Si es que nosotros nos sentimos seguros y bien en el lugar que hayamos seleccionado, es seguro que se lo contagiaremos a nuestros hijos. Si es que no coincidimos con la oferta institucional en el estilo de formación para nuestros hijos, no es el lugar adecuado para ellos”.
¿Cómo elegir el centro infantil adecuado?
Las mejores decisiones siempre se toman cuando se cuenta con amplia información. Esto quiere decir, conocer y evaluar varios espacios y considerar factores claves como localización y costos.
Además de esto, Wendy Frixone propone prestar especial atención al “aspecto humano del personal”. Esto es, la interacción real del personal con los niños. Sostiene que es importante informarse sobre el equipo docente y las prácticas que realizan. No está de más fijarse en la infraestructura, que debe ser segura y adaptada a las necesidades de los niños.
Beatriz Larrea argumenta que es importante considerar metodologías de aprendizaje significativo, mediante experiencias y juegos. Actualmente, se está utilizando la gamificación, además de la didáctica de Montessori, “relacionada con el uso de material concreto, aprendizaje cooperativo, aprendizaje basado en proyectos”. Finalmente, se recomienda conocer el espacio presencialmente, hacer todas las preguntas que se crean necesarias, considerar referencias y experiencias de otros padres en esa institución. El objetivo es aprovechar de mejor manera esta etapa de nuevos aprendizajes y de gran desarrollo neuronal. Brindar a los niños la posibilidad de
enfrentar, de la mejor manera, los retos del futuro.